Siete meses de silencio

Vuelves a hablarme después de siete meses de silencio y yo vuelvo a escucharte como la primera vez que te dirigiste a mí. Te creo a ciegas sin dudar un sólo instante y tú me dices que eso es lo que más te gusta de mí, mi fe en lo imposible, mi lucha por conseguir lo inconseguible. Calmas todos mis miedos y curas todas mis heridas, mientras avanza el día de nuestro reencuentro más esperado. Y me dices lo que tengo que hacer y yo protesto otra vez, mientras empiezo a cambiar todo lo que tiene que cambiar. Se me cruzan los cables y me rebelo contra el mundo y tú me vuelves a decir que eso es lo que más te gusta de mí. Odio tu ironía y tú adoras mi rebeldía. Nos miramos a la cara y nos desafiamos con descaro, pero tú sabes que me acabarás guiando y yo que te seguiré escuchando.