Se me había olvidado por completo lo muchísimo que me gusta esta canción:
Romper, agitar, controlar, locuras que se acaban y dejan paso a la soledad... Está claro que siempre he adorado los cataclismos cósmicos. Lástima que no conozca a nadie capaz de provocar terremotos. Menos mal que Ted ha conseguido ablandar a los cielos y a Robin con su danza de la lluvia. Lo de Marshall y Lily es harina de otro costal...
No hay comentarios:
Publicar un comentario