lunes, 12 de septiembre de 2011

Estabas allí, pero no te vi

Estabas allí, pero no te vi. No logré percibir tu afilada nariz. Llegué, vi y vencí; pero, en realidad, perdí. Me fui sin despedirme de ti. Me reí de ellos y de mí. Resolví no volver a mentir. En sólo unos segundos, caí. Repetí hasta el fin que ya no me acordaba de ti. Reí, bebí y volví a reír. Estabas allí, pero no te vi. No te presentí. Ni siquiera te olí. Salí de allí para huir de mis ganas de morir. Te describí al alguacil. Se burló de mí. Me cagué en ti. Corrí hasta dejar de sentir mi incapacidad de vivir. Estabas allí, pero no te vi y ahora es tarde para acordarme de ti.

No hay comentarios: